Wednesday, January 15, 2014

Día 5: Escucha / Day 5: Listen

-----Español-----
(for English scroll down)

21 Días de Ayuno y Oración por la Unidad

ENFOQUE SEMANA 1:

  • Profundización en la Palabra de Dios.
  • Ser bautizados en el amor sobrenatural de Dios para amarle a Él y a otros.
  • Hambre por andar en pureza por amor a Dios y a otros.
---

Día 5
ESCUCHA


«Mis amados hermanos, quiero que entiendan lo siguiente: todos ustedes deben ser rápidos para escuchar, lentos para hablar, y lentos para enojarse.»
-Santiago 1:19 (NTV)

«Pónganlo todo a prueba, pero quédense nada más con lo bueno, y rechacen todo lo malo»
-1 Tesalonicenses 5:21-22 (TLA)



"En comunicación lo más importante no es quien habla, sino quien escucha." Escuché esta frase en labios de mi buen amigo y comunicador Cesar Vega-AyalaConfieso que nunca lo había pensado de esa manera antes. Muy a menudo me había enfocado en el mensaje, antes que a quién el mensaje es dirigido. 

Una de mis actividades más recurrentes en este tiempo es viajar en aviones. Cuando vuelo, raras veces tengo tiempo de charlar, si no que uso ese tiempo para trabajar, leer o dormir, ya que mi agenda tan cargada a veces me roba esa preciadas horas de sueño. En uno de esos vuelos recientes, tenía mi laptop abierta y estaba lista para escribir mi blog para ese día. Sin embargo, esta vez algo era diferente. Un hombre muy amable se sentó a mi lado. Era muy inteligente y tenía buen sentido del humor. Se comportaba con suavidad y sus palabras eran gentiles y cálidas. Nos pusimos a hablar y me dijo que su nombre era Ahmed. También compartió de cómo vino a Estados Unidos desde Bangladesh, cómo conoció a su bella prometida y cuánto anhelaba casarse con ella pronto. Mientras hablaba de su vida su sonrisa era genuina y única.

Luego de verme tecleando me preguntó si era escritora, a lo que le respondí, "Bueno, yo no diría eso. Sólo escribo algo para mi blog." Y me preguntó, "¿Es eso lo que haces? ¿Eres bloguera profesional?"
Claro que mi respuesta fue no. Aún así  podía ver más intriga floreciendo en su mirada mientras miraba a mi monitor de laptop y preguntó, "¿Acerca de qué blogueas?" Esa era un pregunta difícil de responder para mí debido a que no me gusta "Jesucristoficar" mis conversaciones casuales para evitar sonar muy predicadora. Prefiero que la gente vea que amo a Dios por la forma en que vivo más allá de la forma en que hablo, si sabes a lo que me refiero. Sin embargo, cuando se recibe una pregunta directa, no hay mejor cosa que una sabia respuesta directa. Y dije, "Soy líder de adoración y blogueo acerca de mi relación con Dios." Así no mas. Tal cual. 

Ahmed asintió con su cabeza y sus ojos invitaban a que le dijera más. Así que continué explicando en términos simples que había un grupo de personas que me siguen en redes sociales y todos deseamos mejorar nuestra búsqueda y relación con Dios. Por el bien de hacer mi parte en esto hice una convocatoria a buscar a Dios en ayuno y oración por 21 días con ningún otro fin sino el de unir gente para buscar a Dios juntos. Nuevamente él asintió con su cabeza y dijo, "¡Que bien! Yo soy musulmán y nosotros ayunamos también." Ay, ay, ay. En microsegundos mi mente buscó todas las maneras posibles de disolver la conversación para evitar que terminara en mal. Pero sentí la pequeña voz del Espíritu en mi interior que decía "Está bien. Sigue conversando. Quiero enseñarte algo."

Inmediatamente le dije a Ahmed, "¡Si! He escuchado algo de eso. ¿Cómo lo hacen ustedes?" En ese momento se le iluminó la mirada, y yo supe que era por mi reconocimiento a algo preciado suyo era muy importante para él. Más aún, era una cosa que teníamos en común, en medio de tantas diferencias religiosas. Nosotros, ambos ayunábamos. Él explicó algo de su religión y yo compartí mis creencias. Luego le pregunté, "¿Cuál es el propósito de su ayuno cuando lo hacen?" Y tan pronto hice la pregunta sentía al Señor decirme, "Escucha," y eso hice, atentamente. Ahmed me dijo, "Lo hacemos para purificarnos, pero también para experimentar lo que sienten aquellos que no tienen nada para comer." Wow. Ahora entendía por qué el Señor quería que escuchara con tanta atención.

Más tarde ese día me arrepentí. Le pedí a Dios que me perdonara. Había estado tan enfocada en el aspecto vertical de mi ayuno que había perdido un poco de vista sus aspectos horizontales. Fui movida por una verdad tan profunda. Sé que Dios usó a Ahmed para hablarme. En otro momento de mi vida tal vez ya no hubiese prestado mucha atención a partir de escuchar la palabra 'musulmán'. Ahora bien--y por favor entiéndame cuando les digo que--esto no significa que ahora vamos a prestarle nuestra atención a todo el mundo y a simpatizar con todas las religiones que hay por ahí. Especialmente si van en contra de nuestras creencias en el único y verdadero Dios a quien amamos y servimos. Jesús es la verdad. Pero a veces él escoge usar fuentes externas para hablarnos (Lucas 19:40).

Tomemos el tiempo y seamos prestos para escuchar. Dios está en todo. Él puede hablarnos a través de todo. Echémosle mano a lo bueno y descartemos lo malo manteniendo nuestro corazón abierto a lo que él tiene que decirnos cada momento del día. 

Oración del Día:
"Amado Dios Padre. Te alabamos porque eres un Dios grande y misericordioso. Sabemos que estás en todo y puedes escoger cualquier cosa para ayudarnos a encontrarte. Gracias por enseñarnos a escuchar. Ayúdanos a ser mejores escuchando, para que podamos escuchar tu voz en todo lo que nos rodea. Deseamos honrarte al servir a otros. Danos la habilidad de escuchar para saber las necesidades de otros y así poder servirte a ti mientras les servimos a ellos. En el nombre de Jesús, Amén." 





-----English-----

21 Days of Fasting and Prayer 2014 for UNITY

WEEK 1 FOCUS:
  • To deepen in the Word of God.
  • To be baptized in God's supernatural ability to love Him and one another.
  • Hunger for walking in purity for the sake of loving God and others.
--- 

Day 5
LISTEN

«Understand this, my dear brothers and sisters: You must all be quick to listen, slow to speak, and slow to angry.»
-James 1:19 (NLT)


«Check out everything, and keep only what is good. Throw out anything tainted with evil.»
-1 Thessalonians 5:21-22 (MSG)



"The most important thing in communication is not who speaks, but who listens." I heard this eye-opening phrase spoken by my good friend and professional communicator, Cesar Vega-Ayala. I must    confess, I hadn't seen it that way before. I was one to usually put focus on the message, more than to whom the message was intended. 

One of my more recurring activities these days is traveling on airplanes. When I fly, I rarely have time to chat during the flight. Instead, I usually focus on working, reading or catching up on sleep, since my hectic schedule sometimes robs me of those precious snoozing hours. This time, I had my laptop open and ready to write my blog for that day. Yet, something was different. A very nice man sat next to me. He had a good sense of humor and was very intelligent. His demeanor was soft and his words were kind. We got to talking and he told me his name, Ahmed, He also shared about how he came from Bangladesh. And how he met his beautiful fiancé and hoped to marry her soon. As he spoke of his life, his smile was genuine and unique. 

Later he saw me typing and asked me if I was a writer to which I replied, "I wouldn't say that much. It's just something for my blog." And he asked me, "Is this what you do? Are you a pro blogger?" Of course my answer was no. Still, I could see the more curiosity blooming in his eyes as he looked at my screen and said, "What do you blog about?" That was a tough one. I try not to "Jesus-ize" my casual conversations, to avoid sounding too preachy. I'd rather people realize that I love God by the way I walk the walk, not necessarily the way I talk the talk, if you know what I mean. Still, when under such direct questions, there is no better thing than a wise direct answer. I said, "I'm a worship leader and I blog about my relationship with God." Bam. Just like that. 

His head nodded as if in agreement, and his eyes invited more. So I did say more. I explained in plain terms that there were a group of people that followed me on social media and we all wanted to better our relationship with God. And for the sake of doing my part in that, I made a call to worship and seek God through 21 days of praying a fasting. Not for a purpose other than to unite in seeking God. He again nodded and said, "That's great! I'm Muslim, and we fast too." Oh, boy. In microseconds I though of so many different ways that this conversation can go into an odd direction. Still I could feel the still small voice of the Holy Spirit saying, "It's ok. Carry on with the conversation. I want to show you something." 

I immediately said, "Yes! I've heard of that. How do you do it?" Right away a light twinkled in his eye, and I knew that my acknowledgement of something precious to him was very important. More so, it was one thing we had in common, in the midst of so many religious differences. We fasted. He explained his religion, I explained my beliefs. Later I asked him, "So, what is the purpose of your fasting when you do it?" As soon as I asked that, I heard the Lord tell me, "Listen," so I did. Ahmed told me something that will forever stay with me. "We fast for purification, but also to experience what it's like for those who have nothing to eat." Whoa. Now I understood why the Lord wanted me to listen so carefully.  

Later that day I repented. I asked God to forgive me. I had been so focused on the vertical aspect of fasting that I had lost track of the horizontal aspects of it. I was shaken by such a deep truth. I know God used Ahmed to speak to me that day. In another time of my life I would have probably not listened to this man much after the word 'muslim." Now, please hear me when I that by this I do not mean that we are to go around listening to everyone and sympathizing with every religion out there. Especially if it goes against our belief in the one true God we love and serve. Jesus is the truth. Yet, sometimes he chooses to use outside sources to speak to us. (Luke 19:40).

We must take time to listen. God is in everything. He can speak to us through just about anything. Let us take hold of the good and discard the bad while keeping our heart open to what he has to say every minute of our day.

Today's prayer:
"Dear Father God. We praise you for you are a great and merciful God. We know that you are everywhere and can choose anything to help us find you. Thank you for teaching us to listen. Help us to be better listeners, that we may hear your voice in our surroundings. We want to honor you by serving others. Give us the ability to listen in order to learn what they need so we can serve you by serving them. In Jesus' name, Amen."






3 comments:

  1. Cuanto me estoy nutriendo con este ayuno y estas historias gracias por invitarme a realizar estos 21 días se que Dios cumplirá su propósito en mi. DIOS TE SIGA BENDICIENDO ERES DE GRAN BENDICION .Zuli de PR

    ReplyDelete
  2. Para mi pensar. Hay un solo Dios. Hay creencias diferentes. Perot Dios le ha bla a todos por igual. Es solo tenerlo en such vida, su corazon.Tener confianza y mucha fe.

    ReplyDelete
  3. Escuchar la dulce voz de papá es lo que más anhelo en la vida. No hay otro motivo más fuertemente en mi vida que ese, pero supongo que debo estar mas cerca para oírle con más claridad. Por eso leo este hermoso relato con tal atención porque es como si te hablarán de lo que tu mas quieres en esta vida, gracias mi amada Christine por escuchar la voz de Dios y gracias por decirle si al llamado de Dios para tu vida. Tu has sido una mujer de gran bendición para mi vida y diría yo que un instrumento divino que Dios ha usado para acercarme a El. Te amo, con cariño tu querida hermana Angela!

    ReplyDelete